martes, 22 de septiembre de 2009

España Cañí

Foto: Las potencias del alma (Puente Gentil, Córdoba, 1976)
Autora: Cristina García Rodero


España cañí. El tormento y el éxtasis. Lo místico y lo mundano. La parábola de los dos cofrades: el cofrade que mantuvo intacta la agudeza de su fe (de ahí su puntiagudo capirote) recibe como premio el mundo en sus manos y espera extático a que el Espíritu Santo ilumine su frente con una cagada mística. Y el cofrade que perdió la agudeza de su fe (de ahí la falta de puntiagudo capirote) se entrega al éxtasis mucho más terrenal que proporciona el vino peleón. “Ojú, qué güeno tá”, parece decir. Mientras desde su rincón, el legionario romano de guardia (una de dos; o aquí falta legionario o aquí sobra casco) medita sobre esta dicotomía mientras se fuma un piti. Semana Santa en Córdoba, entre lo sublime y la cazalla, entre lo místico y lo mundano, entre el tormento y el éxtasis. España cañí.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Xavier, la foto no tiene desperdicio, menos mal que la he visto de adulta porque puede resultar traumática y todo (qué caras, Dios mío).

Ay que ver el cruce de piernas tan asombrosamente sexy que tiene el legionario. Ay si César levantase la cabeza¡¡¡

Ana Karenina

P.D. A ver si la próxima vez escribes algo más extenso, por favor.

Xavier B. fernández dijo...

La calidad de un texto no se mide por su extensión, sino por la concordancia entre su extensión y su contenido... y por muchos otros parámetros, claro. Aunque sí, es muy probable que mi próximo post sea considerablemente más largo. Pero ten en cuenta que, aunque tú seas Ana Karenina, yo ni mucho menos soy Lev Tolstoi. Qué más quisiera...

Ana Karenina dijo...

Me habría gustado leer más, me ha sabido a poco sí, porque en tu caso, la cantidad (extensión del texto)no es inversamente proporcional a la calidad.

Buenas noches

Karenina